miércoles, 23 de diciembre de 2015

NAVIDAD DE ESENCIAS


El chef Karamelo Von Appetite  te regala la Vitamina navideña "E",esencial...


Esencia de sabia inocencia 
Esencia de lumbre en su cenit 
Esencia de levadura de canela en rama
Esencia de mirada de mar
Esencia de lágrimas calmadas 
Esencia de danzas al son de la luna 
Esencia de nieve cálida
Esencia de letras liberadas
Esencia de dulce de leche parental 
Esencia de sueños de estrellas fugaces 
Esencia de risas saltando entre poros 
Esencia de abrazos eternos de latidos. 

Esencia de Navidad… 

 Elige tu esencia, es tuya.

martes, 8 de diciembre de 2015

LA INTELIGENCIA A DEBATE


El Chef Karamelo nos regala un relato con vitamina I: Inteligencia, divino tesoro.
Elvira Lindo puede estar ya tranquila sobre la falta de una mujer en ese primer debate, porque anoche, yo por lo menos respiré, al ver a que este elemento lo pone el partido que se supone menos feminista, sí, de acuerdo, que el Gran Jefe huyó, pero ha elegido muy bien a su emisaria, que demostró saber latín y cómo y cuándo utilizarlo. 
Pero he de reconocer que la sensibilidad propia de este género y que brilla en estos círculos por su ausencia, la puso Albert. Una persona que habla el lenguaje del pueblo, cercano, que se mueve y se conmueve con lo que dicen los demás, un ser humano que aunque sé que ha ido a una escuela de teatro políticamente correcta para que le enseñen en que dirección debe mover la ceja derecha en sintonía con el dedo índice de su mano izquierda, se mostró afectado por algo a lo que aún no logro poner palabras. ¿Qué le preocupaba a este hombre ayer? Lo que sea, a mí, también. Chico, eres el único que me ha tocado. Cuando el trabajo actoral político es tan pluscuamperfecto, me pongo a temblar, tanto control y orden resultan fríos y no sé si esto es lo que le hace falta a un país que necesita y quiere crecer.
Reconozco que me ha sorprendido Pablo Iglesias, es increíble, uno de esos profesores sabios de universidad que te dejan sin palabras, sobre todo porque unas cuantas parece que las quitó de mi boca para fines muy diferentes a los que yo pretendo al sentirlas y expresarlas. 
Y Pedro, ni siquiera despertaste en mi interés y cuando te ríes de tus compañeros de faena como si estuvieras por encima del bien y del mal, mientras enfocan con la cámara ese amago de sonrisa, yo corro a destapar el tarro de la miel de mi pueblo para engolosinarme con una generosa cucharada.
Y volviendo a la inteligencia, me pregunto, ¿Qué orden daría a cada uno de los que fueron invitados? La inteligencia lleva al hombre o mujer a hacer el bien, y los listillos que hacen uso de sus saberes para propiciar daño, pierden tan valiosa virtud. ¿Estoy hablando de programas? ¿O de lo que se supone que debe hacer cualquier hijo de vecino que ha decidido poner su carrera al servicio del pueblo?
Me guardo mi opinión al respecto, porque no soy quién para adentrarme en las profundidades de un político, o tal vez sí, porque aquí radica lo esencial, da igual cómo hables, lo que digas, lo que hagas, si no es para hacer un mundo mejor, se te cayó la inteligencia al subir al escaño. Que no se nos caiga a los humanos mundanos, que somos los que ahora sí, tenemos una gran oportunidad de usarla, ¿cómo? Con el color de cada uno, a saber.